Platja d’Aro, ha sido la primera población española en poner en funcionamiento el sistema de última generación en cámaras de video-vigilancia, que permite controlar las matrículas de los coches y detectar si alguna acarrea cualquier tipo de antecedente, como parte del plan de seguridad instaurado tras el violento fallecimiento del presidente de la patronal, al ser asaltado en su casa, durante el noviembre del pasado año 2012.
Las imágenes que captan dichas cámaras, llegan directamente a las dependencias de la Policía Local, quedando registradas durante 30 días y sus matrículas guardadas en una base de datos. Si alguna de estas matrículas se detecta como susceptible del interés policial, la cámara de video vigilancia emite un aviso inmediato, mandando todos los datos tanto a las dependencias policiales como a las patrullas móviles, permitiendo así una rápida intervención por parte de las fuerzas de la autoridad.
El alcalde de Platja d’Aro, ha valorado muy positivamente las pruebas realizadas hasta la fecha, contando ya con más de un millón de matrículas registradas y ofreciendo un plus de seguridad a su ciudadanía, a la par que facilita con ello el trabajo de la policía, con lo que ya se prevé la instalación de cinco cámaras más en esta población del Baix Empordà.